Una de las muchas ventajas que tienen los trenes Alta Velocidad es el permitirnos realizar viajes a cualquier punto de España en el menor tiempo posible, por eso hoy, queremos hablaros de una escapada en el día a Madrid a vivir un día de los más interesante y cultural.
Con la Alta Velocidad y una visita bien planificada, podemos ver lo más relevante y cultural de Madrid en un solo día.
Desde casi cualquier ciudad podemos viajar en Ave a Madrid, veamos algunos de los billetes AVE a Madrid más baratos que hay en la actualidad.
El AVE Barcelona Madrid, desde 32 euros con la tarifa Promo y en clase Turista, en AVE Valencia Madrid, desde 21,70 euros también con la tarifa Promo, el AVE Sevilla Madrid desde 17,45 euros, el AVE Málaga Madrid desde 47,70 euros, el AVE Alicante Madrid desde 19,45 euros con la tarifa Promo, el AVE León Madrid desde 14,75 euros (en este caso es un AV City) o el AVE Zaragoza Madrid desde 20,75 euros.
Pues bien, una vez conocidos reservados los billetes AVE Madrid que necesites, y recuerda, si viajas con niños estos lo hacen más barato e incluso en según qué condiciones, gratis, y si disponéis del Carnet Joven o de la Tarjeta Dorada, tendréis precios todavía más baratos para vuestros billetes AVE Madrid.
Nuestra escapada a Madrid en AVE la comenzaremos tras llegar cómodamente, por visitar a primera hora el Museo Nacional de Prado, recomendamos hacer esta visita de 09:30 a 12:00 porque es la hora en la que menos gente hay y más tranquilos podremos ver este importante museo. Tras la visita es el momento de tomar unas tapas y pinchos, para lo cual, podemos hacerlo de marzo a octubre en la cafetería del Museo del Prado, y si no, podemos ir a la Plaza Cánovas del Castillo donde hay muchos locales donde tomar algo, algunos de ellos con terrazas con vistas a la Fuente de Neptuno. No muy lejos se encuentra el Museo Thyssen – Bornemisza.
Después de comer lo ideal es visitar el Palacio Real de Madrid y sus alrededores, pasando por la calle Mayor y la Plaza de la Villa. La puesta de sol es el momento perfecto para pasear por la calle Bailén y la Plaza de Oriente.
Después podemos comprarnos algunos recuerdos de nuestra visita en AVE a Madrid por el centro y aprovechar para cenar por esta zona, en calles como Segovia, Nuncio, Cava Baja y Cava Alta donde hay todo tipo de restaurantes y tabernas. Para finalizar el día, hay que tomarse unas copas, una buena idea, aunque no es muy barata, es hacerlo en una de las terrazas de los hoteles de Madrid que ofrecen unas vistas y unas instalaciones de infarto.